Bueno, digámoslo así.
Quisiera recuperar una buena-vieja tradición de esta casa. Os presento, con más satisfacción que orgullo, una serie de nuevas (y viejas) fotografías, que muy pronto se unirán a otras tantas (nuevas y viejas), que espero que os gusten.
Como la tapilla que se sirve con la caña y el vino.
Como el refugio después del camino duro.
Como echar un ojo a través de la cerradura.
Como nuevas visiones para los nuevos mundos.