hay luces que iluminan la nochetibiamenteigual el agua que emana de las rocasen los manantialesla sangre que brota de la heridade la Lunanosotros iluminamos con nuestrasextremidades inferiores los camposde trigo y amapolascomo luciérnagas sorprendidaspor la Lunahay luces negras que crecende las ramas de los árboles horriblesde los pantanosbajo el ala protectora de un ángel negrolas luces siempre estaránextinguiéndose o naciendoiluminandosexodineropoderhambre–y esas otras cosasque parecen importantesy no importan tanto